de Carol Zernial, directora ejecutiva de la Fundación Caritativa de WellMed
Yo no lo sé todo. Está declaración no le sorprendería a mi familia y mis amistades y estarían muy de acuerdo con ella. Quizá algunos tengan una sonrisa burlona por el hecho que milagrosamente yo haya descubierto esto.
De niña, en la escuela, solía sentirme frustrada al no dominar un tema de estudio incluso aunque nunca hubiera sido expuesta a ese tema anteriormente. Muy al estilo del personaje de Hermione Granger, esperaba ser una experta instantánea y poder dominar cualquier tema. En los libros de Harry Potter, Hermione efectivamente era la más lista de su grupo en cuanto a temas académicos, pero figuraba entre los peores en la clase de Quidditch de “educación física.” Muy a su pesar, ella no podía lograr que su escoba volara. Ella era inteligente. ¿Cómo era posible que no pudiera dominar algo?
Si esto le suena familiar, es probable que formemos parte de esa clase de personas que cuida de otros y espera , como por arte de magia, saber todo acerca de cómo cuidar a un ser querido. ¿Por qué? Porque pensamos que por haber criado hijos, el cuidar a un adulto debería ser parecido. Creemos que por el hecho de tener conocimientos profesionales de medicina, trabajo social, envejecimiento, negocios, contaduría, cestería, o lo que sea, eso nos debería convertir en expertos en el cuidado de alguien. Al fin y al cabo, somos profesionales. Creemos que porque amamos incondicionalmente o conocemos a fondo a la persona que cuidamos podemos prever y cumplir sus necesidades.
Seamos bondadosos con nosotros mismos y desechemos la idea de ser expertos instantáneos en cuidar de otra persona aunque jamás lo hayamos hecho. En primer lugar, los sistemas de servicio médico y servicios sociales en este país están fragmentados y son complicados además de tener huecos enormes en los criterios de calificación. No existe un “sistema” de servicios y beneficios a largo plazo. Nos podríamos confundir más al hacer conjeturas sobre los beneficios, como la errónea creencia común de que Medicare paga cuidados a largo plazo. No los paga. Medicare solamente paga cuidados especializados temporales después de una hospitalización. Medicaid paga servicios a largo plazo, pero la persona tiene que cubrir los gastos hasta alcanzar el nivel de pobreza para poder calificar. Existen asesores de beneficios profesionales y administradores de atención geriátrica específicamente porque no hay modo de saber lo que no sabemos. . Hay que estar bien informados para tomar mejores decisiones.
En segundo lugar, cuidar de otros se complica a causa de nuestras experiencias y relaciones a través de los años. Si no nos llevábamos bien con uno de nuestros padres, esto no va a cambiar repentinamente ahora que le estamos cuidando. La devoción que le tenemos a un ser querido puede cegarnos a la realidad de su condición. ¿Cuántos de nosotros no quisimos darnos cuenta de que nuestro cónyuge o padre ya no era la misma persona, incapaz de manejar las finanzas ni estar segura en su propia casa?
Finalmente, el cuidar de otra persona es un tema aparte. No es lo mismo que criar hijos. Las variables son completamente distintas: de joven a mayor edad; de cada vez más independiente a cada vez más frágil; de resfriados y gripe a enfermedades crónicas de largo plazo. Lo que sí es igual es el amor, la dignidad, el respeto y las recompensas. Pero debemos asegurarnos de incluirlos en nuestro vocabulario y nuestras acciones ya que no siempre surgen de manera natural.
La próxima vez que pensemos que somos o deberíamos ser cuidadores perfectos automáticamente, recordemos que somos humanos y estamos haciendo todo lo que podemos. Quizá no siempre podamos hacer volar mágicamente nuestra escoba, pero podemos pedir apoyo a profesionales que pueden aconsejarnos sobre cómo despegar.
Carol Zernial, directora ejecutiva de la Fundación Caritativa de WellMed es una renombrada gerontóloga, presentadora de un programa de radio y presidenta emérita del Consejo Nacional para el Envejecimiento. La Fundación Caritativa de WellMed no lucrativa se enfoca en programas gratuitos para los adultos mayores y los familiares que les cuidan, e incluyen sesiones semanales de aprendizaje por vía telefónica, clases comprobadas para eliminar el estrés y más. Infórmese más en www.CaregiverSOS.org o llame sin cargo al 1-866-390-6491.
