Los dolores de cabeza, incluidos los causados por hambre, han atormentado a los seres humanos desde que aparecimos en el planeta. ¡La primera vez que se hace mención de ellos es el año 1550 a.C.! Como era de esperarse, hemos encontrado mejores formas de lidiar con ellos que nuestros antiguos ancestros. Después de todo, los neandertales no podían ir a su farmacia local a comprar aspirina.
Hoy en día sabemos mucho más acerca de los dolores de cabeza y sus causas. Algunos tipos, como las migrañas, pueden ser problemas de salud serios. Otros, como los dolores de cabeza por no comer, tienen una causa sencilla.
Eso no significa que los síntomas no sean muy desagradables. El dolor que abarca la parte frontal y lateral de la cabeza no es divertido. Cuando las náuseas, la tensión en la cabeza y la nuca, los mareos y el sudor acompañan el dolor de cabeza, lo que usted quiere es sentirse mejor rápido.
Afortunadamente, un dolor de cabeza por hambre normalmente desaparece a los 30 minutos de haber comido. Lo que es mejor, hay algunas cosas fáciles que puede hacer para evitar un dolor de cabeza por no comer.
Mantener niveles óptimos de azúcar en la sangre.
Un dolor de cabeza por hambre es la forma no tan sutil de su cuerpo de decirle que está funcionando con el tanque vacío. Como el cerebro es el que manda en el cuerpo, le envía el mensaje doloroso. Así que, si se saltó el desayuno y tomó una bolsa de papas fritas de la máquina expendedora para almorzar, es lógico que su cabeza se rebele.
Consumir comidas saludables en intervalos regulares proporciona al cuerpo el combustible que necesita para mantener los niveles de azúcar en sangre (glucosa en sangre) bajo control. Todas las células del cuerpo necesitan azúcar para funcionar correctamente. El bajo nivel de azúcar en sangre (hipoglucemia) también es un síntoma de diabetes. Hable con su médico si sufre frecuentes dolores de cabeza por hambre para descartar algún problema de salud.
Intente seguir este consejo: Consuma comidas más pequeñas más seguido. Elija alimentos frescos e integrales en lugar de alimentos procesados repletos de conservantes y azúcares añadidos.
Alimente su cabeza.
Tal vez piense que el estómago es exigente, pero la cabeza bien puede hacerle la competencia. Es extraño pensar que la cabeza tiene apetito, pero así es. Entonces, ¿Qué tipo de comida le gusta a su cabeza? Resulta que la cabeza tiene antojo de alimentos saludables.
Para mantenerla contenta, aliméntese con frutas y verduras frescas, crudas (las cocidas sin grasa o azúcar añadida también son buenas). El arroz integral y los granos (cereales) integrales son su forma favorita de carbohidratos. Las nueces y semillas siempre son un acierto, especialmente si los consume como refrigerios saludables entre comidas. Las proteínas que liberan energía lentamente mantienen al cuerpo alimentado con un flujo constante de nutrientes. Elija carnes frescas y pescado.
Intente seguir este consejo: Coma refrigerios entre comidas. Lleve siempre consigo un pedazo de fruta, queso en tiras o nueces peladas para que pueda darle al cuerpo una dosis de comida saludable y evitar un dolor de cabeza por no comer.
Cárguese de energía con proteínas.
Las proteínas constituyen una poderosa defensa contra los dolores de cabeza por hambre. Las proteínas que liberan su energía lentamente son especialmente útiles, no solo porque hacen que el cuerpo se sienta lleno durante más tiempo, sino porque lo mantienen alimentado con un flujo constante de nutrientes. La carne y el pescado son una buena fuente de proteínas de liberación lenta. Sin embargo, sea selectivo.
Aunque los perros calientes del estadio y su pizza de pepperoni favorita sean deliciosos, es muy probable que su cabeza se estremezca. Ambos tienen nitratos, un aditivo que puede causar dolores de cabeza. Como regla general, aléjese de las carnes curadas, ahumadas y secas. Además, aunque el queso es una gran fuente de proteínas, algunos quesos añejados pueden causar dolores de cabeza en algunas personas. Algunos de estos son los quesos feta, parmesano y suizo.
Intente seguir este consejo: Dé a su cuerpo una inyección de energía. Disfrute un vaso de leche fría o una cucharada de queso cottage con fruta y galletas saladas. Unte mantequilla de cacachuate (maní) en tallos de apio o rodajas de manzana.
Beba más agua.
El agua es el mejor amigo de su cuerpo. De hecho, la mayor parte del cuerpo está compuesta de agua. El 73% del cerebro está constituido por agua. Cuando usted escatima en agua, los vasos sanguíneos del cerebro se encogen. ¡Ay! Con razón la cabeza se rebela con un intenso dolor de cabeza.
Según la mayoría de las pautas, debemos beber al menos ocho vasos de 8 onzas de agua todos los días. La cantidad exacta depende de su peso, edad, nivel de actividad, todas las cosas que rodean su vida en casa y en el trabajo, y cualquier problema de salud que pudiera tener. Hable con su médico familiar para saber cuánta agua debe beber todos los días para que pueda evitar los dolores de cabeza por hambre.
Intente seguir este consejo: Beba agua a lo largo del día, aunque no tenga sed, porque cuando siente sed, usted ya está deshidratado.
Tenga cuidado con su consumo de cafeína.
Millones de personas dependemos de la cafeína para cumplir con fechas límite en el trabajo, aguantarles el paso a nuestros hijos y tener suficiente energía para afrontar nuestros días ajetreados, pero además de proporcionar un codiciado aumento de energía, la cafeína dilata los vasos sanguíneos.
Cuando se salta o reduce su ingesta de cafeína, los vasos sanguíneos sufren un síndrome de abstinencia de cafeína y se constriñen para protestar y manifestar su descontento. Si normalmente bebe dos o más tazas de café al día, es posible que sufra un dolor de cabeza por hambre los días en que no ingiere cafeína.
Intente seguir este consejo: Si desea reducir o deshacerse por completo del hábito del café, no lo haga de golpe. Disminuya poco a poco la cantidad de cafeína que consume durante algunas semanas para que su cuerpo se acostumbre a consumir menos cafeína.
Pase más tiempo con su almohada.
Si no come bien, es probable que tampoco duerma bien. Puede parecer que recortar algunas horas de sueño no es un gran problema, pero sí lo es. Ya hemos visto cómo comer proteínas saludables ayuda a mantener a raya los dolores de cabeza. Sin embargo, si no duerme lo suficiente, usted podría estar arruinando sus esfuerzos.
La falta de sueño puede empeorar el dolor constante y los dolores de cabeza. Establezca un buen ritual antes de dormir para que el cuerpo obtenga el preciado sueño que ayuda al cuerpo a sanar y estar sano.
Intente seguir este consejo: Acuéstese a la misma hora todos los días. No consuma cafeína al menos seis horas antes de irse a dormir, mantenga laptops, televisores y teléfonos fuera del dormitorio y ajuste el termostato a una temperatura fresca.
Piense rápido antes de ayunar.
El cuerpo es sensible a los cambios en los hábitos alimenticios, incluyendo el desayuno. El ayuno intermitente para perder peso y mantenerlo se está volviendo muy popular, por lo que no es de sorprender que las personas también sufran dolores de cabeza por ayunar de forma intermitente. Es normal tener hambre durante períodos de ayuno. Sin embargo, si los dolores por hambre van acompañados de dolor de cabeza, reconsidere sus acciones.
Antes de ayunar, aléjese de la cafeína y beba más agua. Cuando coma, no se llene de alimentos poco saludables porque tenga hambre. Elija alimentos saludables que le proporcionen al cuerpo el combustible necesario para funcionar adecuadamente.
Intente seguir este consejo: Haga que la comida anterior al período de ayuno cuente. Consuma carbohidratos complejos y proteínas de liberación lenta para que le ayuden a sobrellevar el período de ayuno.
Hable con su médico.
Los dolores de cabeza por hambre no son graves. Sin embargo, si sufre dolores de cabeza frecuentes que no desaparecen después de tomar analgésicos de venta libre (OTC, por sus siglas en inglés), informe a su médico. Ya sea que se lo mencione durante un chequeo anual de bienestar o pida una cita el médico solo para hablar de esto, pregúntele si podría haber una razón médica por la que sufre dolores de cabeza.
Además, hágale saber a su médico de atención primaria si tiene dolores de cabeza repentinos o intensos junto con otros síntomas, como:
- Confusión
- Mareos
- Arrastra las palabras
- Pérdida visual
Intente seguir este consejo: Manténgase al día con sus chequeos de bienestar, ya que es la mejor forma de asegurarse de que los problemas de salud se detecten a tiempo cuando se pueden tratar más fácilmente.
